jueves, 29 de marzo de 2007

cositas

Hay cosas pequeñas que normalmente damos por supuestas y a las que nunca damos importancia.. Cuando faltan, tomamos consciencia de que pueden llegar hasta a ser imprescindibles.

Adherencia: Se define (además de otras formas que omitiré por irrelevantes) como:
-Unión física, pegadura de las cosas.
-Cualidad de adherente.
-Resistencia tangencial que se produce en la superficie de contacto de dos cuerpos cuando se intenta que uno deslice sobre otro.

Bien, es la tercera la acepción que me interesa.
La suela de mis zapatillas resbala, carece de adherencia, así que los días de lluvia se han convertido en algo peligroso y bastante incómodo, sobre todo en los tramos de adoquines cuadrados y pequeños o en las zonas blancas de los pasos de cebra.
En estos días, voy buscando el asfalto y las zonas más rugosas en busca de la superficie más adecuada. La realidad se transforma y ahora tengo controlados, en los trayectos más habituales, que zonas son más o menos resbaladizas. Esto hace que yo, animal de costumbres para algunas cosas, haya cambiado el camino que recorro hasta el metro por otro más adherente los días lluviosos. Por poner sólo un ejemplo.
Asi que este invierno, conseguir estar pegado al suelo se ha convertido en algo complicado a veces...

Pues eso, algunos días me cuesta avanzar. Y es curioso que no sea por estar demasiado pegado al suelo... sino por todo lo contrario.

Nota final: Hablaba de las pequeñas cosas. Tener un grano en la punta de la nariz es otra de esas cosas estúpidas. A veces, la simetría es un incordio.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Oye, sin ánimo de darte cepillo me pareces genial, por lo menos ahora. Así es que... en vez de cambiar de zapatillas o zapatos como el común de los mortales te diseñas un recorrido adecuado a los días lluviosos... Esto es francamente interesante.El amor por tus zapatillas transforma la realidad y doblega las inclemencias del tiempo.
Como yo también le tengo cariño a mis zapatos también me he encontrado en esa situación de falta de adherencia pero al carecer de tu espíritu Mc Gyver al finalizar el día se me olvidaba el problema y me enfrentaba a la misma incomodidad al día siguiente sin tener ningún plan trazado como tú.

Hoy hemos aprendido que en la jungla del asfalto las peligrosas lineas del paso de cebra son todo un desafío para el ser humano de sexo varón que quiere conservar integra la personalidad de sus zapatillas ( todo este último párrafo con voz en off de Félix Rodriguez de la Fuente)

Sigue así eh? Sin hacer las cosas como las hacen los demás.

En cuanto a lo del grano en la nariz no se me ocurre nada creativo que decir,procura ignorarle.

Anónimo dijo...

Jo, todo un honor si te parezco genial (por lo menos ahora) pero bueno, no es para tanto :p
La verdad es que le suelo coger cariño a mis zapas pero estas en concreto me tienen ya un poco harto, porque además de resbalar cuando llueve tienen unos cordones que se desatan a cada momento. Ya escribiré una cosa que me paso el otro día relacionada con eso
Mola cuando las cosas materiales trascienden porque les cogemos cariño... Con lo que más me pasa es con mis mochilas. Las necesito, sin duda

Intentaré mantenerme intacto