sábado, 7 de abril de 2007

sinceridad bruta

¿Y si dijésemos todo aquello que pasa por nuestra cabeza sin pensar en las consecuencias?
Por ejemplo, ¿Qué pasaría si le comentases a ese buen amigo tuyo que estas harto de esa cosita en concreto que tanto te saca de quicio a sabiendas de que por su caracter se va a cabrear contigo?
¿Qué pasaría si no te cortases un pelo y al pedir tu opinión sobre algo fueses demoledoramente sincero?
Soy consciente de que hay gente que es así, pero creo que no es lo habitual. Normalmente, usamos la mentira para disimular o ignorar las pequeñas cosas que les pasamos a los demás y que no son importantes si hacemos un balance general de lo que nos gusta y no nos gusta de alguien.
Sé que no es nuevo pensar esto, reflexionar sobre esto... Porque en varios miles de años se le ha ocurrido a muchos otros por fuerza, pero, no deja de parecerme curioso que algo tan difamado y rechazado de plano. La mentira, sea practicamente imprescindible para que consigamos llevarnos bien; o al menos, aguantarnos.
Así que sigo preguntandome ¿qué pasaría si absolutamente todos y cada uno de nosotros fuese absolutamente sincero en todo momento?

Yo creo que sería catastrófico... Aunque me gustaría empezar a hacerlo...

No hay comentarios: